jueves, 18 de octubre de 2007

MISA NEGRA V - CLUB MIST - VIERNES 12 DE OCTUBRE















Review: Jaime Gómez (Sir Lord Baltimore). Fotos: Menesín.

Tras una prolongada ausencia de dos meses y medio y una última jornada que estuvo muy cerca del desastre, las Misas Negras renacieron de sus cenizas con una noche a la altura de las circunstancias, entregando un show perfecto, de altísima calidad en todas sus bandas y con todas las cartas jugadas en entregar rock del bueno a la audiencia que decidió llegar la "noche de la raja" al Club Mist.

Dos incógnitas que rondaban mi mente eran despejar cómo el baterista de Humberstone y organizador de estas tocatas (don Pedro Ogrodnik) iba a sortear la prueba de tocar en dos bandas (los doomeros Esquizoide y los debutantes El Gran Temor) la misma noche, y la verdad es que el Blackpriest (o Comisario del Doom, como le pusieron los integrantes de Hielo Negro debido a su pinta, con botas y chaqueta de cuero y una enorme cruz colgada al cuello) se sacó dos cartas por debajo de la manga con el talento de sus compañeros.

ESQUIZOIDE abrió fuego cuando el reloj estaba clavado en las 23:30 horas. La descarga sólida y urgente de los tres temas de su demo, más la psicotrópica novedad que presentaron ('Hombre Ciego' creo se llamaba) nos mostraron a una banda firme, con un propósito de espesor clarísimo y tan transparente que casi constituye una paradoja con la densidad doom a la Saint Vitus que es la carta de presentación de este trío. 25 minutos muy bien plantados que nos dejaron con ganas de saber más de esta joven agrupación.





EL GRAN TEMOR, debutaba absolutamente en estas lides, pese a la presencia de Ogrodnik en la batería y al hecho de que Paillao (voz y guitarra) es hombre de experiencia en las arenas death metal de su natal Temuco. Y la verdad sea dicha, estuvimos en presencia de una tremenda banda. Hipposos, melódicos (esos coros a dos voces son un bálsamo, pero todavía hay que trabajarlos un poco pa que salgan perfectos en vivo), casi épicos y progresivos a la vez que muy sencillos, trajeron lo mejor de los 70s a la Misa Negra. Aguas de Yajaira y Cathedral se entrecruzaban con sutileza en un show que pareció venido de una máquina del tiempo. ESPERO EL DEMO, que tengo entendido ya grabaron.





ELECTROZOMBIES fue una aplanadora en cámara lenta, paseándose por todo su material (disco 2005, demo mmvi y temas nuevos) con la solidez y putrefacción acostumbrada de este perverso trío. Las chicas Z están en su hora más fina para tocar, 10 puntos, mientras que Comegato aportó oscuro carisma en sus desgarradores gritos y en su guitarra necrótica. 40 minutos de funeral sónico y barro en las cavidades auditivas.








HIELO NEGRO trajo consigo la fiesta de rock que suele ser cada presentación de los ya clásicos magallánicos, con una hora de hits cantados a voz en cuello por los más de 100 asistentes a la velada, aportando novedades del próximo album "Purgatorio Bar" y concesiones al culto como 'Halcón Milenario', 'El Riff' y 'El Quiebre'. Disfrutadísimo show de los patagónicos, que cerró como se debe la quinta y hasta ahora mejor edición de las Misas Negras.

Sí, tal como dije, la del viernes fue la mejor de las 5 Misas Negras que se han hecho hasta el momento, superando por algunos centímetros a la notable 3 (con Winexperience, Savannah, Humberstone y Cañonero) y a la recordada Misa Negra original (con Hielo Negro, Sick Porky desde Argentina, Supercabrón y Humberstone). Ojalá veamos pronto la sexta edición de estas tremendas tocatas de rock under.

ENGRANAJE - "Ser Animal" (2007 Independiente)



Dentro de las bandas nuevas aparecidas en la escena rockera nacional nos detenemos ahora en Engranaje, jovencísimo grupo de Copiapó (sus edades andan entre los 18 y 20 años) que tras algo más de dos años tocando en su ciudad se hicieron del repertorio suficiente, los contactos y las movidas para registrar, gestionar y finalmente lanzar su primer álbum, “Ser Animal”, en un entretenido mini tour por Copiapó, Coquimbo y Santiago.

Engranaje está compuesto por Salim Elal en voz y guitarra, Nicolás Meza en guitarra líder, Bambino (sic) Arancibia en bajo y coros, y el asesino de tarros Samuel Tello. Una formación muy sólida en el terreno del directo, que en su primer trabajo ratifica esa solidez técnica, en 10 temas que muestran lo que ellos definen como “rock ermitaño”: una mezcla a partes iguales de hard rock, metal y grunge con fuerte énfasis en el manejo de su base rítmica, con el correcto bajo de Bambino marcándole el camino a la técnica y metalera batería (harto uso del doble pedal y del china) de Tello, sobre los cuales se teje el trabajo de guitarras, basado en riffs simples y pegadizos, y por sobre ello se sitúa la gruesa y vigorosa voz de Elal, un cantante rockero nato.

Para ser un disco debut, “Ser Animal” cumple con sobresalientes en una excelente ejecución e interpretación instrumental. El manejo rítmico está bien aceitado, al igual que el fiato de banda, se nota que se conocen bien en virtudes y defectos musicales. Ese conocimiento se advierte en cortes como ‘El Aprendiz’, ‘Ermitaño’, ‘En Sueños’ (con el mejor solo de guitarra del disco) y ‘Ser Animal’, a mi juicio el mejor tema del disco, fuera de esa taquilla entrada acústica, gracias a su desarrollo y su excelente final.

Ahora los puntos bajos. Me parece que la idea musical central se repite muy seguido y en muchos temas, así como la temática lírica de búsquedas, relaciones sentimentales y diversión también se hace demasiado recurrente. Todo esto puede hacer este disco algo plano y en momentos predecible. La voz de Elal, si bien es excelente por naturaleza, suena muy influenciada por Eddie Vedder, algo impostada en su pronunciación y debería buscar un sello más propio y distintivo, sobre todo si tomamos en cuenta que es un cantante que cuenta con el talento natural como para lograrlo.

Pero estos detalles no logran opacar del todo una muy buena y correcta producción, que debería pavimentar el camino de Engranaje hacia su estilo propio y hacia su consolidación dentro del panorama más grasiento del rock nacional. Son una banda joven y potente, con hartas barreras por romper. Aguante.

Pedro Ogrodnik C.

TRAKTO - "Trakto" (2007 Bolchevique Records, Independiente)

Nuestra fructífera pero poco apreciada escena subterránea nos entrega un nuevo lanzamiento y corresponde al debut homónimo de Trakto, banda que viene haciendo de las suyas desde 2002. Luis Felipe Zschoche (voz y guitarra), Camilo Díaz (bajo y voz), Jockey (batería) y ahora último Pepenacho López, reemplazando a Bandi en guitarra y teclados, encarnan a esta interesantísima agrupación, cuya principal influencia, a partir de lo que escuchamos en este disco, es el sonido de Queens Of The Stone Age: riffs arenosos y una base en momentos muy pesada se cruza con juguetonas y muy escuchables melodías que a menudo dialogan en logradas armonías a dos voces y además se intercalan con insertos sonoros de diversa procedencia.

“Trakto”, el debut discográfico de estos muchachos, fue grabado entre agosto y noviembre de 2006 en los estudios de Bolchevique Records, con un resultado final que da una excelente impresión, sobre todo por el aplastante sonido que consiguen al aplicar riffs, que se matiza con ideas musicales de diverso origen y estilo que dan un carácter ecléctico al sonido de Trakto.

Algo muy interesante que tiene el sonido de esta agrupación es el increíble sentido melódico que tienen, al darle de un modo completamente natural un carácter pop –del bueno- muy saludable a sus coros y temas. Como digo, este factor ganchero en las melodías en ningún momento suena forzado ni mucho menos como una imitación o algo simplista, simplemente destila naturalidad, intuición y manejo instintivo por las buenas y agarradoras combinaciones de notas. Esto salpica el disco desde el primer segundo de la blusera y sureña ‘Intro’ hasta desvanecerse en la grungeosa ‘Outro’, ambos cortes acústicos que sirven como telón para los otros 13 temas que sacan bajo la manga.

Entre los temas propiamente tales, destaco la fiera interpretación vocal de ‘Cambio Piel’, lo vacilón de ‘Carretera’, ‘Perfecta Voz’, ‘Ya Sé Muy Bien’ y ‘Mal Licor’, la lograda melodía de guitarra española en ‘G.E.M.Y.’, la sicodelia circense de ‘Carrusel’, la zeppeliana base de ‘No Importa Perder’ y la potencia desenfrenada de ‘Trakto’, ‘Sin Razón’ y la derechamente metalera ‘Placer Dolor’. En todos puedo recalcar el buen y parejo nivel de cada uno de los músicos: Zschoche es un guitarrista y cantante muy completo, Díaz salpica el disco de asertivas líneas de bajo, Jockey azota sus tarros con una fuerza que es muy responsable del potente sonido de la banda y las melodías en los teclados de Bandi edulcoran esa potencia en pos de lograr de un modo más claro el carácter ecléctico del sonido Trakto.

Pero por otro lado sólo puedo reparar en la enorme influencia que ejerce Queens Of The Stone Age sobre la banda, algo que a muchos hará creer errónea e injustamente que estamos frente a una copia o a una imitación: el manejo compositivo y melódico de Zschoche logra esquivar obstáculos facilistas y al final logra imprimir un sello propio a sus temas. Por otro lado, mi otra crítica apunta a que el arte del disco es algo infantil, demasiado ‘microsofteado’, amateur y le baja un poco el pelo al excelente resultado sonoro que lograron en la grabación. Sería sumamente provechoso para la banda cambiar el arte para una futura edición de este trabajo, para hacerle más justicia a su contenido musical.

No obstante la crítica anterior, el primer disco de Trakto –y su excelente desempeño como banda en vivo, muy sólidos- es uno de los mejores lanzamientos nacionales que he podido escuchar durante el año. Son una excelente banda a la que sin duda se debe tener en cuenta a la hora de ir a ver buenas tocatas de grupos locales.

Pedro Ogrodnik C.